En el pasado Maratón de Boston donde se presentaron temperaturas muy altas, la Boston Athletic Associaton (BAA) responsable del maratón, debido a una ola de calor exhortó a los maratonistas a no competir ofreciendo la opción de respetar el lugar para el próximo año, algo inusual en el maratón más deseado de todos.

Ellos sabían que el pronóstico del clima no era bueno, cercano a los 30 grados centígrados más humedad, temían que algunos corredores pudieran colapsarse.

Para sorpresa de ellos, no de nosotros, la inmensa mayoría que entre la clasificación y el entrenamiento habíamos invertido mucho tiempo de nuestras vidas sin contar los gastos del viaje, decidimos correr y enfrentar el reto del calor.

El día anterior al maratón en una charla de Runner’s World, tanto Jennifer Van Allen como Amby Burfoot insistieron en correr lento, aumentar algunos minutos al paso por milla, usar una estrategia conservadora ahorrando energía para evitar problemas por el calor.

Jen Van Allen comentó: “Disfruten la carrera, la gente te pregunta si corriste Boston no que tiempo hiciste”

La BAA en el kit del corredor entregó un folleto del World Road Race Medical Society sobre la hidratación para un maratón, aquí una parte del artículo:

El estar adecuadamente hidratado es importante durante una carrera de maratón por seguridad y rendimiento. El estado de la hidratación en un corredor de maratón depende del balance entre la pérdida de sudor y el reabastecimiento de fluidos. La deshidratación ocurre cuando la pérdida de fluidos no es reemplazada adecuadamente, la sudoración se incrementa por:

• Condiciones calurosas y húmedas
• Genero, los hombres sudan 30% más que las mujeres del mismo peso
• Nivel de acondicionamiento (Más acondicionamiento igual a más sudor)
• Aclimatización (Más entrenamiento en el calor igual a más sudor)
• Paso al correr (Paso más rápido igual a más sudor)

Agregan que un clima caluroso y húmedo especialmente cuando es inesperado, aumenta la sudoración y la aparición de la deshidratación, aumentando también el riesgo de fatiga prematura y enfermedades relacionadas con el calor.

La deshidratación incrementa el ritmo cardíaco e impide la pérdida de calor, esto causa que los maratonistas disminuyan su paso o abandonen la carrera.

De acuerdo a la sociedad médica especialista en carreras de ruta, la mejor manera de evitar la deshidratación es beber suficientes fluidos para minimizar la pérdida de peso durante la carrera. Pero también evitar sobre-hidratarnos y ganar peso.

En maratonistas rápidos, la sed a menudo tarda en llegar y puede ser un indicador tardío de deshidratación, es por eso que los corredores rápidos necesitan saber cuanto fluido reemplazar cada hora. Esto lo trataremos en otro artículo.

En el Maratón de Boston gracias al continuo abastecimiento, a la gente que tenía hieleras con agua helada y a los hidrantes abiertos por los bomberos, la mayoría de los corredores logramos terminar bien el maratón.