Una pregunta que muchos corredores nos hacemos esta temporada: “¿Es bueno correr resfriado?”
Probablemente no, ya que tu cuerpo necesita grandes cantidades de energía para combatirlo y recuperar su estado de forma.
Si decides correr, tu cuerpo tendrá que repartir sus reservas energéticas entre el ejercicio y la recuperación. El peor de los escenarios posibles es o bien que te sientas peor después de correr o que tu recuperación se alargue.
A los corredores nos cuesta estar encerrados en casa mucho tiempo y, a veces, salir hace que nos sintamos mejor y no tengamos remordimientos por estar en casa todo el día.
Realiza la “Prueba del cuello”
Algo común entre los corredores es la denominada “Prueba del cuello”: si padeces síntomas del cuello para arriba, hacer ejercicio no será un problema para ti; si los síntomas se presentan también del cuello para abajo, es preferible mantener reposo hasta estar recuperado.
- ¿Congestión, moquera o dolor de garganta? Puedes correr sin ningún problema.
- ¿Dificultad para respirar, fiebre o dolor muscular? No corras y manténte en reposo.
Correr al principio de un resfriado puede ser incluso recomendable, ya que permite abrir las vías respiratorias y expulsar la mucosidad. Además, la famosa “euforia del corredor” (runners rush) te ayudará a generar endorfinas.
Si tienes fiebre o te cuesta respirar, es mejor mantener reposo, ya que podrías desarrollar alguna infección pulmonar que te obligue a suspender tus entrenamientos durante más tiempo.
Si decides mantener reposo y recuperarte, lo mejor es que aceptes la situación y no te dejes estresar por tener que parar tu rutina de entrenamiento. Tómalo con calma y pronto te sentirás mejor.
Corre más…#RunMX